El espíritu sólo es feliz en libertad

Jamás renuncies a tu libertad y voluntad por una creencia, sea esta una religión, una ideología política o filosófica, por muy elevada que parezca, porque si se te pide que renuncies a tu libertad por ella tienes que tener claro que no vale la pena. Analiza los mensajes no idolatres al mensajero. Si el mensaje no te convence expone tus dudas y exige aclaraciones y si sigues identificado con dicho mensaje entonces recházalo. No aceptes nada por dogma de fe que te exija creer sin comprender, lo que no se interioriza por experiencia propia, por sentimientos, por comprensión, por análisis, sino que se hace como una imposición externa que no se comprende y sólo se acata por un principio de autoridad es decir, porque alguien supuestamente divino lo dice no sirve para evolucionar ni para ser más feliz, porque el espíritu sólo es feliz en libertad. Por tanto nada de fe ciega, ni de estamentos que controlan y manipulan la espiritualidad. Busca la respuesta en tu interior, que es mucho más sabio de lo que crees, porque tiene una conexión directa con tus propios guías espirituales, con la espiritualidad superior.